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¿Qué son los in-ear y para qué sirven?
28 de mayo de 2021
A la hora de tocar en directo es muy común que los músicos utilicen monitores in-ear en lugar de monitores de escenario. ¿Sabes qué son exactamente los in-ear y qué ventajas y desventajas implica su uso? Hoy en Sounds Market os contamos las claves sobre este polémico tema.
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Los in-ear y sus ventajas
Los monitores in-ear (dentro de la oreja) se caracterizan por transmitir el sonido directamente a nuestro oído, de manera que sólo el que los lleva recibe la señal. Esta es la diferencia fundamental respecto a los monitores de escenario, que irradian el sonido al músico, pero también al resto de la sala.
En este sentido, los monitores in-ear tienen varias ventajas. La primera es que, aunque el músico se mueva, va a seguir recibiendo el monitoreo alto y claro. Los monitores de escenario, por otro lado, sólo se escuchan bien en ciertas zonas, por lo que existe el riesgo de que el músico pierda cobertura si se aleja demasiado.
La segunda es que, en caso de haya micrófonos en el escenario (como sucede generalmente), estos pueden captar también el sonido del monitor (más o menos dependiendo de su colocación), lo que aumenta el riesgo de que se produzcan acoples. Este es el motivo por el cual los técnicos de sonido suelen recomendar el uso de los in-ear, ya que permiten captar el sonido directo del concierto de forma mucho más limpia.
La última ventaja es que permiten al músico escuchar el metrónomo en caso de que lo desee y sin que el público lo perciba. Esto es muy útil en caso de que haya un backtrack de apoyo, como un sintetizador o unos violines, y se necesite una referencia para seguirlo.
Desventajas de los in-ear
La gran desventaja de los in-ear es que, para poder emitir la señal alta y clara al músico, deben aislarlo del sonido externo. Esta sensación de aislamiento puede producir cierto rechazo a los músicos, especialmente en estilos donde se busca un sonido lo más orgánico posible y las dinámicas juegan un papel particularmente importante como puede ser el jazz.
Esto también puede resultar un hándicap a la hora de mantener una comunicación fluida con el público, por eso es frecuente ver cómo los cantantes que utilizan in-ear se los quitan en los momentos de la actuación donde necesitan escuchar la respuesta de los espectadores.
Por último, tenemos la desventaja del desembolso que implica hacerse con unos buenos in-ear. Existen distintas posibilidades dependiendo del presupuesto con el que contemos, la utilidad que les vayamos a dar y nuestras necesidades concretas como músicos.
Modelos de in-ear y alternativas
En realidad, se le puede llamar in-ear a cualquier modelo de cascos, incluidos los que vienen con el teléfono móvil. Este tipo de cascos low cost nos pueden ser útiles en situaciones donde la presión sonora externa no es muy alta y no se requiere aislamiento, pero la calidad del sonido suele ser más bien baja sobre todo en frecuencias graves.
Los auriculares de escenario que suelen utilizar los músicos se caracterizan, además de por transmitir una señal de alta calidad, por su forma perfectamente adaptada a la oreja que impide la entrada de ruidos externos. Este aislamiento se consigue gracias a fundas de silicona personalizadas y fabricadas a partir de un molde de nuestra oreja, que se suele hacer en centros auditivos especializados. El efecto es parecido al de llevar unos cascos over ear, de los que te cubren la oreja, ya que nos permite percibir mucho mejor el sonido pero sin ese impacto visual. Existen marcas especializadas como Ear Protech que venden los auriculares y las fundas, pero el modelo más barato ya cuesta 300 euros.
Los cascos over ear suelen ser una opción bastante recurrente sobre todo en estudios de música, ya que en estos espacios no resulta tan extraño ver a los músicos con cascos. En un escenario, sin embargo, la sensación visual de aislamiento de los músicos se intenta evitar, ya que se trata de buscar el mínimo distanciamiento posible entre artistas y público.
Conclusiones
Teniendo en cuenta todas estas claves, cada uno tiene que valorar hasta qué punto necesita unos monitores in-ear profesionales. En muchas bandas solamente los lleva el batería o la sección rítmica, ya que son los que llevan el metrónomo. En otras los lleva toda la banda y en otras ninguno, es cuestión del estilo y las necesidades concretas del show.
Lo que sí recomendamos es proteger los oídos lo máximo posible, especialmente si ensayamos algún estilo que implique mucha presión sonora, ya que nuestros tímpanos son muy sensibles y con el paso del tiempo son frecuentes las pérdidas de audición.
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